En esta sección (todavía en construcción) nos ocupamos de algunos temas que son demasiado extensos para abarcarlos en un comentario y demasiado específicos como para tocarlos en la introducción.
Las entradas «En detalle» son presentaciones de tipo enciclopédico sobre un tema dentro de los poemas homéricos, que pueden incluir el comentario de bibliografía pero no defienden una postura específica.
Las entradas «En debate» son más extensas e incluyen discusión sobre un tema, pudiendo defender una determinada postura sobre una cuestión.
Los invitamos a contribuir con sus propias entradas para esta sección, cumpliendo los siguientes requisitos:
- En detalle: hasta 2000 palabras (no incluyendo bibliografía). No incluir notas al pie.
- En debate: hasta 5000 palabras (no incluyendo bibliografía). No incluir notas al pie.
En ambos casos pueden enviarnos sus contribuciones a nuestro mail de contacto en un archivo de Word y nuestro equipo las evaluará y publicará, con el debido reconocimiento a su autor.
Tengo una pregunta sobre el texto de «En debate-El Catálogo de las naves». En la sección de la técnica compositiva pone «la naturaleza del Catálogo de las Naves hace imposible pensar en cualquier otra forma de preservación que no sea la transmisión memorística». Pregunto, ¿por qué se excluye categóricamente la posibilidad de que el Catálogo haya sido elaborado a partir de una fuente escrita? Un saludo y enhorabuena por la calidad de este sitio.
José, es una buena pregunta. Hay varias cuestiones en juego. En primer lugar, no hay una tradición escrita que vaya del periodo micénico hasta la Grecia Clásica (https://iliada.com.ar/introduccion/la-historia/), por lo que la geografía micénica solo puede haberse transmitido por escrito. Es segundo lugar, la idea de una «fuente escrita» pensada como un texto histórico se contradice con el hecho de que no tenemos testimonio de ningún texto de este tipo anterior al tardío siglo VI a.C. (https://en.wikipedia.org/wiki/List_of_ancient_Greek_historians); una fecha muy tardía para Ilíada permitiría un apoyo en estas fuentes, pero entonces tenemos el problema del huevo y la gallina: ¿de dónde habrían sacado estas fuentes información sobre periodos muy anteriores a ellas? En tercer lugar, los autores antiguos, que tendrían acceso a muchas más fuentes que nosotros, no afirman nunca que el poema esté basado en otra cosa, lo que, sin ser definitorio en sentido alguno, por lo menos apoya la idea de que el Catálogo proviene de una tradición propia. Y en cuarto lugar, la idea de un apoyo en la escritura exclusivo para el Catálogo resulta contradictorio con la naturaleza oral del resto del poema, donde no hay ningún ejemplo comparable de reproducción de información de estas características. Espero que te sirva la respuesta. ¡Muchas gracias por tu comentario!
Gracias por la respuesta. Sí, estoy de acuerdo en que hay dificultades como las que señalas para que el catálogo derive de una fuente escrita, pero no me parece que sea imposible. No sería necesario, en mi opinión, que dicha fuente fuera un documento histórico, sino que puede ser una lista de lugares o itinerarios de rutas. Incluso tampoco sería necesaria una fuente escrita de la época micénica, sino que podría ser de un momento posterior. Por citar un paralelismo, en el Himno homérico a Apolo también se citan itinerarios (véanse los versos 25-51; 215-245; 420-440). Dado que hay ciertas similitudes entre el Himno de Apolo y el catálogo de las naves, se puede pensar que al menos algunos de esos topónimos tomaron como referencia el catálogo. Entonces, ¿por qué no podría ser que el catálogo de las naves se parezca a otra fuente escrita, que no se ha conservado? Sobre todo porque el gran número de topónimos del catálogo de las naves parece precisar de alguna referencia más que la memoria en la que apoyarse para evitar cometer errores (que yo sepa, el único que hay es la repetición de Augías con el mismo epíteto en dos contingentes distintos). Esto lo digo intuitivamente, claro. Quizá infravaloro la capacidad de la memoria humana. Un cordial saludo.
Ciertamente no podemos rechazar de plano el uso de documentos escritos, y, de hecho, Martin West ha construido una teoría sobre la composición homérica basada en la idea de la escritura. Pero, habida cuenta de la ausencia de evidencia, la cuestión pasa por qué es más probable y dónde está la carga de la prueba. No tenemos realmente paralelos de tradiciones orales que utilicen ayuda-memorias de este tipo («de este tipo» subrayado, porque sí hay otros que se utilizan), y la idea de una lista escrita presenta dos inconvenientes como forma de ayuda-memoria: primero, ¿cómo se utilizaría? ¿Se leería en vivo? Esto es absolutamente imposible. Pero si el rapsoda debía memorizarla, entonces no hay razón para que exista, porque el Catálogo sería memorizado. El segundo inconveniente es que presupone que el Catálogo sería algo fosilizado, y esto es harto improbable: además de adaptaciones a lo largo del tiempo para acomodar nuevos pueblos y cambios de nombres, es concebible que cada rapsoda y cada performance lo variaran un poco para acomodar gustos del público. Por supuesto, nada de esto impide que hubiera un documento escrito, pero la existencia de este documento del que no tenemos ningún testimonio complica las cosas sin ofrecer realmente ganancia alguna.